La evolución que ha experimentado Twitter en estos últimos años está fuera de toda duda. Las posibilidades que ofrece esta red social de "micro blogging" sorprenden a todos por su versatilidad y sencillez. Al principio todo el mundo pensaba que sería un plataforma para "frikis" a los que les atraía la idea de actualizar su perfil con una mayor regularidad, pero poco a poco ha mostrado su capacidad de adaptación para otros usos. No sólo es una red de "geeks" sino también para periodistas, medios y organismos oficiales. Desde canciones, pasando por chistes o pensamientos; Twitter se ha convertido en un universo paralelo en el que cada uno muestra lo que quiere con una mayor privacidad y una capacidad de interacción tan sencilla como eficaz.
Como es natural, la comunicación política no iba a permanecer al margen. Aunque ya se utilizaba desde antes, fue Obama quien la puso en boca de todos -aunque actualmente sea McCain quien la emplee mejor- y ahora ni Hugo Chávez ni el mismísimo Fidel Castro se resisten a usarla. Hoy es raro el político o el candidato que no esté presente en esta red. Pero, al igual que hemos comentado en otras ocasiones, Twitter puede decirnos mucho de su propietario. Viendo el perfil de una persona se puede descifrar el uso que da a esta red. El número de seguidores y seguidos (lo cual nos habla del interés del titular de la cuenta, por "el resto del mundo"), la frecuencia de su actualización y la cantidad de "retweets" o menciones, muestran la implicación del usuario y su manejo en el uso de esta curiosa red.
Pero ni mucho menos se trata de una red de carácter global. De cara a las próximas municipales, un Twitter bien utilizado podrá ser una herramienta fantástica. El tradicional puerta a puerta se sustituirá, en ocasiones con menciones, mensajes directos, etc. Esta red dará la posibilidad de acercarse a un público o sector del electorado a la que tradicionalmente pudiese costar más trabajo hacerlo. Pero, como hemos dicho antes, esto sólo será posible si se hace dando un uso correcto a la red. De nada servirán los perfiles abandonados que únicamente existen para tener la exclusividad de un nombre o aquellos que tan sólo se dedican a reproducir las palabras de éste o aquel. Un perfil atractivo deberá escuchar lo que dicen sus seguidores, intentar ofrecer respuestas y satisfacer sus demandas. No sólo debe servir como altavoz, sino como medio para comunicarse de forma directa y bidireccional con los ciudadanos.
Otro asunto es el de la post-campaña. Tras ella, algunos candidatos parecen olvidarse de mantener activos sus perfiles en la red tras las elecciones lo cual podría despertar en los ciudadanos cierta sensación de desengaño. Pero ese, es otro tema.
2 comentarios:
Con las elecciones se volverán los más en todo y después si te he visto no me acuerdo, acuérdate de la señora Sindel que decía que internet era solo para mandar correos.
Saludos muy buen artículo
La verdad es que sí, pero también es cierto que hay algunos políticos que lo usan bastante y bien.
Muchas gracias por el comentario.
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