Tras ver el último debate sobre el estado de la nación, parece que el Partido Popular no termina de arrancar. En las encuesta se observa que, si bien ganaría unas hipotéticas elecciones, su líder, como apuntó el presidente Zapatero, no está para tirar cohetes. Pero ¿por qué?
Los populares no consiguen motivar a un electorado ávido de propuestas. Mientras en 1996 se evocaba la solución por un mañana mejor; hoy, el partido liderado por Mariano Rajoy parece anclado en el problema y en los errores del Gobierno sin lograr comunicar su verdadera capacidad de solución, si bien éste fue, precisamente, su eslogan en las últimas europeas: soluciones.
En las primeras elecciones en las que se impuso Aznar se comunicaban ilusiones y proyectos. La voluntad de un mañana mejor por encima de las adversidades.
Los ciudadanos ya han asimilado que el país tiene problemas. Pero no quién tiene la solución. Es por esto por lo que necesitan una figura que logre encarnar un verdadero cambio. En EEUU, en las pasadas elecciones, vimos cómo los Demócratas lograron que el electorado se preguntase si era posible que los mismos que llevaban al país a la ruina, lo sacasen de ella. Funcionó, a pesar de que McCain era otra persona. La gente le identificó como parte del problema y no como solución.
En 2009, paradójicamente, el PSOE, planteó una campaña similar en las europeas. Pese a llevar 5 años lejos del poder, el presunto culpable de la situación era el PP y ellos la ilusión, el optimismo y el futuro (a pesar del polémico anuncio).
Ahora el PP tiene una posición "privilegiada". Los populares deben comenzar a generar ilusión en lugar de empecinarse en mostrar al culpable de la situación por la que pasa el país. Es el momento de avanzar, de crear esperanza en una población ávida de optimismo en vez de continuar con su particular "cruzada" contra Zapatero.
La ciudadanía es consciente del problema, ahora precisa una figura que represente un mañana mejor. ¿Estará Rajoy preparado para ello? Sea como fuere, quien consiga encarnar esa idea tendrá muchas papeletas para llegar de una manera más solvente a la Moncloa en las próximas elecciones.
3 comentarios:
Está claro que ni el PSOE ni el PP entusiasman a casi nadie hoy en día. La gran mayoría los que conozco que aseguran apoyar a una u otra opción de nuestro bendito bipartadismo afirman que el principal motivo es, simple y llanamente, que la otra les parece aún más lamentable.
"-Fulanito, como puedes apoyar a esta panda de incompetentes que nos llevan a la ruina?
-Si ya, pero el PP me da más miedo. No son claros en ofrecer alternativas. Seguro que es porque si dicen lo que quieren hacer realmente nadie les votaría..."
"-¿Menganito, no ves que los peperos son unos irresponsables, que son capaces de atacar a la policía por detener a sus sospechosos por corrupción?
-¿Y que quieres, que siga ZP, para ver cuánto tarda en quebrar el país?"
Lo que está claro es que IU y UPyD verán aumentar sus votos en 2012, como de hecho ya lo indican muchas encuestas. Ninguno de estos dos pequeños partidos son santo de mi devoción, pero sin duda me alegraré profundamente si, con ayuda del voto en blanco y de la abstención, hacen sufrir al "bipartito" su merecido castigo. Por inútiles, por irresponsables, por arrogantes....
Enhorabuena por el árticulo y el blog. Un abrazo
Nuestro panorama político sufre una de las mayores carestías de carisma desde la Transición a la democracia... Ése es nuestro problema... Por descontado el del Partido Popular. A Mariano Rajoy le falta fuerza y dinamismo. Parece como si aún estuviese lelo después de las resonante derrotas en las dos Elecciones Generales pasadas.
Pero, desde mi punto de vista, lo que le falta al Partido Popular es PROYECTO. ¿Qué quieren hacer de España cuando ya se han dado cuenta de que están absolutamente solos en el panorama político? ¿Dónde está el interés general que presumen defender? En sus posicionamientos políticos yo no lo veo.
Existe lastre dentro del Partido Popular; es ese lastre el que no deja avanzar al partido y el que lo ancla a un pasado que la mayoría de la población española rechaza. ¿Cuándo serán capaces de soltarlo?
Mi receta personal para el PP: sangre nueva, gente joven.
Gracias Periko!
Gracias a todos por vuestros comentarios.
La verdad es que parece que el desencanto empieza a hacerse patente entre los ciudadanos, aunque, como ya comentamos en alguna entrada, habría que ver cómo responde el electorado una vez entrados en campaña.
Un abrazo!
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