Gazpachuelo versus 'Tea'

¿Qué tienen en común el té y el gazpachuelo? Aparentemente poco, salvo que ambos se podrían considerar, en su esencia, líquidos.
Desde hace unos meses venimos prestando atención al movimiento de Lavidamoderna Merma en Málaga. La labor de dinamización de la campaña on line,  de la que ya se habló en este blog, continúa no sólo con la interacción con políticos y representantes; si no con la creación de un nuevo concepto "el Gazpachuelo Party". 

La idea es promover una suerte de encuentros digitales a través de Twitter con políticos de la ciudad. Los usuarios plantean las preguntas a Lavidamoderna los días previos y ellos se encargan de hacérselas llegar a los entrevistados. 

El nombre de Gazpachuelo Party, hace alusión al célebre Tea Party en EEUU aunque en la práctica no tenga demasiado que ver. El Tea Party, está vinculado al Partido Republicano. A grandes rasgos, reivindica una política fiscal más conservadora frente a ciertas políticas puestas en marcha por la administración; y la vuelta a los valores constitucionales de su país. Por su parte, la versión malacitana busca una implicación de los ciudadanos por las políticas de su ciudad proponiendo temas de debate y diálogo que normalmente no aparecen en los periódicos ni en las tertulias radiofónicas. Merece la pena destacar, que la versión andaluza no mantiene ningún vínculo partidista, se limita a pedir la participación y respuesta de los políticos poniéndolos en algún que otro aprieto en cierta ocasión. Así pues, tienen en común lo mismo que el té y el gazpachuelo: su esencia. Ambos son movimientos sociales que buscan la movilización e implicación de los ciudadanos, poco más. 
A pesar de esto, el nombre está muy bien escogido, haciendo referencia a algo tan típico de la ciudad como el Gapachuelo y aludiendo también al germen estadounidense para captar la curiosidad e identificar en cierto modo la iniciativa. 

Independientemente de que los políticos consigan superar con éxito la "prueba" del Gazpachuelo Party, el movimiento ya ha sido un éxito. Las repercusiones en prensa y la expectación que crea (con el #GazpachueloParty en twitter, al que sucedieron algunos perfiles sospechosos) así lo demuestran. Se ha creado un nuevo canal de comunicación entre políticos y ciudadanos, gestionado y promovido por Lavidamoderna,  movimiento que ya se ha convertido en un elemento ineludible para explicar la campaña online de las municipales. 

Se habla mucho de quién anda detrás estos perfiles. Algunos ven en el partido rival al promotor de la idea y quizá éste sea el secreto de su éxito: representar a una grupo heterogéneo de ciudadanos que tienen inquietudes y al que le importa su entorno por encima de partidos y siglas. La esencia de Lavidamoderna es su anonimato, no se trata de que nadie se esconda tras él, cualquiera puede consultar los seguidores que tiene con nombres y apellidos; es innecesario humanizar una iniciativa social con tantos seguidores.
Algunos critican que se hable tanto de política, cuando en realidad el supuesto fin del movimiento era la reivindicación de la cultura en la ciudad. Otros entienden que 2011 es una oportunidad única para lograr compromisos políticos que permitan un desarrollo más sólido de la cultura. Sea como fuere,  Lavidamoderna se mantiene como catalizador y 'dinamizador' de la campaña. 
Internet es una carrera de fondo. Sólo el paso del tiempo y la gestión del cambio nos mostrarán el verdadero fondo y calado de este interesante movimiento.